Esta popular celebración se estableció en homenaje al escritor José Hernández, autor del Martín Fierro, una de las obras cumbres de la literatura gauchesca, quien nació el 10 de noviembre de 1834.
Por
Fabricio Espíndola
Tradición
quiere decir «donación o legado», y abarca el conjunto de costumbres
que suelen transmitirse de generación en generación. La tradición de una
nación suele incluir su cultura popular, el gran acervo de música,
comidas, juegos, actividades y muchas otras costumbres de cada región
del país.
El «Día de la Tradición» recuerda el nacimiento del escritor y periodista José Hernández, autor de El Gaucho Martín Fierro,
poema de género gauchesco que se convirtió en una pieza literaria
consagrada del folclore argentino, y fue traducido a numerosos idiomas.
La efeméride fue instaurada el 18 de agosto de 1939, con la promulgación se promulgó la ley Nº 4756.
José Hernández, su vida
Nació el 10 de noviembre de 1834, hijo de don Rafael Hernández y de doña Isabel Pueyrredón. Fue poeta, periodista, orador, comerciante, contador, taquígrafo, estanciero, soldado y político.
En 1843, cuando su madre falleció, su padre lo llevó a vivir al
campo por recomendación médica. En el entorno campestre tomó contacto
con gauchos. Allí conoció sus costumbres, su mentalidad, su lenguaje y
su cultura. Aprendió a quererlos, a admirarlos, a comprenderlos, y
también a entender sus dificultades en la vida cotidiana.
En marzo de 1857, poco después de fallecer su padre, se instaló
en la ciudad de Paraná, donde –el 8 de junio de 1859– contrajo
matrimonio con Carolina González del Solar. Tuvieron siete hijos.
Inició su labor periodística en el diario El Nacional Argentino, con una serie de artículos en los que condenaba el asesinato de Vicente Peñaloza.
Se
desempeñó como diputado y, luego, como senador de la provincia de
Buenos Aires. Tomó parte activa con Dardo Rocha en la fundación de La
Plata y, siendo presidente de la Cámara de Diputados, defendió el
proyecto de federalización por el que Buenos Aires pasó a ser la capital
del país.
En 1869 fundó el diario El Río de la Plata, en cuyas
columnas defendió a los gauchos y denunció los abusos cometidos por las
autoridades de la campaña. También fundó el diario El Eco, de Corrientes, cuyas instalaciones fueron destruidas por adversarios políticos. Colaboró además en los periódicos La Reforma Pacífica, órgano del Partido Reformista; El Argentino, de Paraná, y La Patria, de Montevideo, Uruguay.
En el orden militar actuó en San Gregorio, en El Tala e
intervino en las batallas de Pavón y de Cepeda. Luchó además junto a
López Jordán en Entre Ríos.
Vivió en Brasil, también en Entre Ríos y Rosario, y en
Montevideo (Uruguay). En 1870, al fracasar una revolución, tuvo que
volver a Brasil. Dos años después, gracias a una amnistía que frenó la
violencia, pudo volver a su país.
El 28 de noviembre de 1872, el diario La República anunció la salida de El gaucho Martín Fierro y, en diciembre, lo editó la imprenta La Pampa.
Su éxito entre los habitantes de la campaña lo llevó, en 1879, a continuarlo con La vuelta de Martín Fierro. En 1881 publicó su obra Instrucción del estanciero.
Falleció el 21 de octubre de 1886 en Buenos Aires, tras sufrir una afección cardíaca.
El gaucho Martín Fierro, más de 140 años
Poema narrativo argentino, escrito en verso por José Hernández
en 1872, obra literaria considerada ejemplar del género gauchesco en la
Argentina, Uruguay y Río Grande del Sur (sur de Brasil). Debido a que
tiene una continuación —La vuelta de Martín Fierro, publicada en 1879—, este libro es también conocido como «la ida». Leopoldo Lugones, en su obra El payador,
calificó al poema como «el libro nacional de los argentinos» y
reconoció, o colabor en el gaucho la calidad de genuino representante
del país, emblema de la argentinidad
Martín
Fierro de José Hernandez
El Martín Fierro narra la incorporación forzada del protagonista
al ejército, la huida y su amistad con Cruz. Todo el poema está impregnado de denuncia social y encierra grandes verdades políticas
como la falta de educación, la mala organización judicial y
militar, la deficiencia de la policía rural y, sobre todo, un
profundo resentimiento de la clase popular de campaña contra
las clases urbanas. El lenguaje del libro es un claro exponente
del habla rural.
Versos
del Martín Fierro
Aquí
me pongo a cantar
Aquí me pongo a cantar
Al compás de la vigüela;
Que el hombre que lo desvela
Una pena extraordinaria,
Como la ave solitaria
Con el cantar se consuela.
Pido
a los Santos del Cielo
Que ayuden mi pensamiento;
Les pido en este momento
Que voy a cantar mi historia,
Me refresquen la memoria
Y aclaren mi entendimiento.
Vengan,
santos milagrosos,
Vengan todos en mi ayuda,
Que la lengua se me añuda
Y se me turba la vista.
Pido a mi Dios que me asista
En una ocasión tan ruda.
Yo
he visto muchos cantores
Con famas bien obtenidas,
Y que después de adquiridas
No las quieren sustentar:
Parece que sin largar
Se cansaron en partidas.
Cantando
me he de morir,
Cantando me han de enterrar,
Y cantando he de llegar
Al pie del Eterno Padre.
Dende el vientre de mi madre
Vine a este mundo a cantar.
Que
no se trabe mi lengua
Ni me falte la palabra
El cantar mi gloria labra
Y poniéndome a cantar,
Cantando me han de encontrar
Aunque la tierra se abra.
Roberto Fontanarrosa fue el autor de las ilustraciones y el guión
que le dan vida a una versión animada de Martín Fierro. La película
(2007).